lunes, 20 de abril de 2020

Paulo Galvez (Talca), ilustraciones.

Paulo Galvez, ilustrador de emociones bizarras y poderosas. Posando la mirada sobre estas expresiones ilustradas se puede encontrar aquellos sentimientos que han sido reprimidos por espacios societales estandarizados.






José Luis Muñoz Barrios (Talca), versos.

Quién sabe cómo descifrar las claves de la tierra
Quién tiene un conocido ignorante
Y vende sus enseñanzas en la calle Uno Sur
Quién se cree capitalino (crucifíquenlo)

José Luis Muñoz Barrios nació el 3 de diciembre de 1986 en la ciudad de Talca. Escritor y profesor de Castellano egresado de la Universidad Autónoma de Chile, también aficionado a las artes escénicas en general, las cuales integra en su ejercicio pedagógico de manera transversal y genuina apostando fortalecer no sólo las competencias básicas del curriculum nacional, sino que también busca potenciar la formación artística en sus alumnos mediante la ejecución de talleres y módulos diversos. Actualmente es candidato a Magíster en Enseñanza de las Humanidades: Literatura y Artes visuales por la Universidad de Talca, con un trabajo de investigación que lleva por título “Mapurbe. Venganza a raíz: los neologismos en la poesía  de David Añiñir”.
        
Su poesía se caracteriza, fundamentalmente, por emplear un hablante lírico subversivo a través de  un lenguaje rebelde, contestatario, frente a los temas de contingencia local y nacional. Se define como un joven desgarbado, lleno de proyectos, seguidor de las lecturas de Pablo de Rokha, Enrique Lihn, Rodrigo Lira, Juan Luis Martínez y los telúricos Jorge Teiller y Elicura Chihuailaf. Entre sus pares lo han denominado como “el Rimbaud talquino”.

 Su obra se titula “Códigos & Escenas” (Editorial La Horca, Santiago, 2015).






SCANNER (EXILIADO EN EL 75)

Lucho patito
Grita en los rincones de Talca
Su llanto desérticamente
Por sus mala decisiones,
Por sus familias medievales
Que a punta de flechas
Castiga su espinazo
Y las mujeres perdidas
Amigo de lo fatal
De los boleros
Y la depresión adquirida
No por moda ni capricho básico
Sino por inventar vehículos que le permitan
Navegar en el asfalto y los peajes de su Talca querido
Furioso
De una concesionaria malnacida
Y el descaro potentísimo
De los gubernamentales y los grandes relatos,
Un pencazo en la cuchara
Que ni el marcapaso ni tío Piñera ni Trupp logra interrumpir
Porque lucho patito fue milico
Y su amor a la bandera hizo llamar a sus hijos:
Puro Chile, tu cielo y azulado
Ése último es el más cuático y eternamente contradictorio.
Patito vomita su futuro
Un resorte que lo empuja hacia lo intergaláctico,
Enfrenta sus pecados
Entre la salmuera y el vinagre curtido sanjavierino
Ama el rotito
Y amar no es tan sólo un juego
Es un texto lindo y perdurable
Que la tierra ni la pobla lo olvida.


OBJETO

La muerte saca sus garras
como culebras serpenteando
las esquinas rectangulares.
Un grito se escucha desde lejos
lauchas royendo el escombro y la podredumbre,
porque nadie se salva de la pelá y sus besos de cenicienta,
porque este disco volador gira como el tagadá de un parque de entretenciones:
Luces, colores, formas, olores y la música The Kiss de fondo sacándose la chucha
a modo de gracia y no literal.
La muerte anda roncando por ahí,
sin abogados ni semidioses de gerencia
enseñando sus dientes de ajo, mirando bajo la rendija
llorándole a Dios para pillar al condenado.
Finalmente en lo perdido
el arma más mortal sigue siendo la poesía.

Poemas de Ángela González Covarrubias (Curepto)


Los siguientes son versos de Ángela González Covarrubias (1987), profesora de Estado en Castellano, de Curepto.




Cadáveres de humo

Cuando las luces se apagaron
Ya nadie supo más qué hacer
sembraron capullos de ideas
sobre la tez estéril
del que ya no respira más.
Que  fue el exceso de pueblo
Que las esporas ladinas que se le incrustaron
en la mente al muerto
que el silencio desgarrador de las tardes
le carcomió el cráneo
que el canto de los grillos lo empujó
bajo el  puente la farmacia.
 Le llenaron la cabeza de estrellas
la soledad  apuñaló sin piedad su sentido común
aposándose en su corazón blindado

La memoria es frágil
Y todo cadáver es bondadoso
Cuando la  historia es borrosa
Los ojos miopes de los coterráneos
A veces se olvidan
De las estafas
Del maltrato y los abusos
Todo muerto es bueno.

Sin embargo el viento
Remueve escombros de recuerdos
Y aparecen las escenas:
cuando lo expulsaron del liceo
por el rumor ese
que manoseaba a los del prekinder
o cuando le puso un clavo
al profesor de ciencias
quien después de eso
se puso a vender seguros

los rumores no mueren
no al menos en este pueblo
la piedad no existe
no por lo menos
para el magnolio
que parece estar de fiesta
ni para las camelias
un tanto cursis y sobrevaloradas.
Cuando las luces se apagaron
un cuerpo cesó de respirar
y nació una historia
que se reprodujo
como las esporas malignas
que afectan las mentes de los

deslenguados habitantes.



Silver Amnesia

Sus cenizas fueron esparcidas por el cerro wil wil
todos loco  nocian
John Amnesia creció en el centro del pueblo
deambulaba en estado alfa, decían
le faltaba sueño, le sobraba magia
miraba el futuro en las pupilas
los vecinos eran cines ambulantes
de terror y alivio

Decían que levitaba en las noches
por las calles, que nadie recorre
cuando -solo los faroles acusan moralidades.

Bryan Amnesia bebía apasionadamente
vino en caja para el hambre
vino con tristeza
vino con alegría
y pasaba días sentado en la pileta
mirando la cruz caída de una iglesia muerta
revolvía el agua musgosa con una varilla de maqui
tomaba el sol en el borde
y le echaba un vistazo al futuro de los transeúntes
ebrio siempre acertó
sobrio siempre sonrió

Un día se le acabaron las ideas
volvieron los recuerdos
que con mucha dedicación
había mandado a borrar
volvieron los recuerdos que lo aniquilaron
se le secó el corazón ...
y en la pileta de la plaza
se dejo consumir por los rayos
dia tras dia
se deshizo de sol
nadie supo de su cuerpo
nadie supo de sus útimas palabras
de su ultimo suspiro
nadie recuerda su nombre.
solo se dice que el puelche
llevó sus cenizas al wil wil
y desde allí vigila las mentes ebrias
y las memorias perturbadas
de los que han sido tragados
por el pueblo de la indiferencia.
kevin amnesia se esparce en paz



Idas y vueltas

Pasajera en trance, pasajera en tránsito perpetuo. Ch. Garcia

Ventana:
Los recuerdos golpean las sienes y la vida va quedando atrás
disipándose entre pinos y napas sedientas
Entre las nubes que corren como auténticas gacelas
chilenas
del paseo Ahumada.
Veo tu rostro con insistencia y se difumina
Entre ecos del camino
 que se vuelve cada vez más remoto
Cara pegada al vidrio.
Cierro los ojos
Hasta el próximo
Lomo de toro.

Pasillo:
Miramos resignados el camino que avanza
Como una pantalla de cine en 3D
Los camioneros forestales  que no vieron
Destino final
Y un codazo en el ojo, me quita los lentes anáglifos.

Ventana:
Sigo mirando por encima del sol, a ver si te encuentro

Pasillo:
Me taparon la puta pantalla gigante.
No hay nada que mirar
Nada que ver.

Ventana :
Fue un día como tantos otros
Sin audífonos y me niego a conversar.

Pasillo:
Yo quería ventana!


Versos de Ricardo Meza / Zaróm (Talca)

Versos viajeros de Ricardo Meza (Zaróm), poeta de Talca que del tiempo existencial desliza imagen sencilla para conmover el espíritu.




Arde

Todo arde,
Todo arde...
Me dijo con su piel chamuscada
No hay cobijo para los cobardes 
La sangre forma ríos de lava 
Atesorando fósiles de caras
Entre monedas fundidas.

¿En dónde está tu Dios? 

¿En dónde están tus estudios? 

Todo arde,
Todo arde
Me dijo con su cabellera de llamas.



Entre arena y telarañas congeladas

Mi corazón está en tus sombras
que resultaron ser el humo de una fantasía
que se quema lentamente… y tú,
triste, extendiste tu mano ante algo inalcanzable.

Oh, princesa mía, confundida y conmocionada,
ahora caminas a solas por la ciudad de la niebla.
Te observo, con tus ojos rojos y tus labios azules
buscando en huellas de neumáticos tu regreso a los bosques.

Y yo, sigo con la fe de convertirme en príncipe,
con mis piernas quemadas y mis manos secas,
buscando respirar entre tanta gente,
haciendo barquitos de papel, esperando la lluvia.

Pero ¿cómo culparte por tu fragilidad?
En tus ojos vi el epitafio de una sonrisa enterrada
y tú, en los míos, un viajero noble, pero perdido.
Entre arena y telarañas congeladas,
ambos supimos aceptar el adiós.



Libre

¿Arrancándome las uñas dejaré de sentirme ansioso?
¿Bañando mi cerebro en ácido gástrico se derretirá la rígida estructura?
Mis intestinos me amarran las muñecas a las murallas y
dejan mi pecho seco, humeante y polvoriento al descubierto. 

Me pican las encías,
el olor del cinturón de cuero me afila los dientes.
Las ideas se revuelven e inducen al vómito caliente,
avinagrado y oscuro como lo poco que queda de esperanza. 

Entonces la luz de la luna entra por una pequeña rendija,
haciendo que el corazón se contraiga bruscamente de dolor.
Las arterias estallan y sangre y bilis salen expulsadas violentamente
arrastrando larvas y ojos sobre el cemento desolado y frío.

Yazco derramado...
Yazco libre.














Postales del viaje del verso

Estas son las postales del viaje del verso donde se han encontrado tesoros líricos y fuentes constantes de inspiración en la Región del Maule (Chile).