Julio César Marín Jara, versos de mausoleo / extracto de "Mausoleo: el hedor de las palabras", Ed. La Horca, Santiago, 2019.
Pórtico silente
La curiosidad mató al gato. La curiosidad mató al gato…
Es el resabio de aquella vez….
La condena esperaba que mis oídos se dejaran llevar
Siempre hay llamados,
Este con su voz seca atemporal acecha la inquietud trémula.
Los lugares de frialdad escondida tienen voces quebradizas
Voces sensuales y excitantes que la naturaleza inquieta no puede evitar
seguir
Cabalgan en los pies de nombres ennegrecidos al olvido
Y debajo de estos mohos y detrás algún flor seca
Está esa voz quejándose, llamando
Esta ahí acicalándose cual ninfa deshojada de la moral
Dispuesta a ser la eficaz relatora de un camino silente...
Ahí está en la entrada de los dinteles
Susurrando al destino
Vigilando los pasos
Así es como he puesto los pies entre las lágrimas que se quedaron a
dormitar
Expectante de la caída de la noche
Los guardianes de esta morada espectral han dejado caer los goznes del
pesado hierro tras mis espaldas
Ahí sólo queda el vacío del grito
La no acogida del socorro
La recogida del cuerpo al secreto que conlleva esta vigilia con huesos…
No hay comentarios:
Publicar un comentario